Concurso de Cuento Corto Universitario: el reto de enfrentar una hoja en blanco

El pasado 29 de junio se llevó a cabo el Concurso de Cuento Corto Universitario en las instalaciones de la Biblioteca Central José María Serrano Prada de la Universidad del Cauca. Los participantes contaron con tres horas para realizar la escritura de su cuento y articular las dos temáticas que les fueron dadas al inicio de la jornada. La premiación se realizará el 18 de noviembre, en el marco de Popayán Ciudad Libro 2019.

La apertura del Concurso de Cuento Corto Universitario se realizó el 29 de mayo, junto con la convocatoria para el Concurso de Cuento Corto Juvenil, que iba dirigida a los estudiantes de Intituciones de Educación Media. Para la convocatoria de cuento corto universitario la dinámica fue sencilla. Los estudiantes debíann realizar una preinscripción vía internet, para posteriormente participar del concurso que se realizóen en una única jornada el 29 de junio, donde se llevó a cabo el proceso de escritura creativa en torno a dos temáticas especificas que les fueron dadas ese mismo día. Cabe decir que estps cpncursos son organizados por la Vicerrectoría de Cultura y Bienestar de la Universidad del Cauca en el marco de la agenda literaria pre-feria Popayán Ciudad Libro 2019.

Anteriormente, a los estudiantes inscritos en el concurso se los invitó a participar de un taller  donde se les brindó herramientas literarias para escribir un cuento corto. La actividad que fue realizada en la Facultad de artes de la Universidad del Cauca y dirigida por el docente de español y literatura Daniel Chamorro. Esta estuvo enfocada en dar pautas a los jóvenes sobre como enfrentar una hoja en blanco, para esto se abordaron dos lineas de trabajo: la primera estaba guiada a la construcción narrativa y gramatical de un cuento, y la segunda tenia que ver con el proceso creativo de escritura y sobre como se puede volver tangible un elemento en el mismo.

Desde las nueve y media de la mañana y hasta aproximadamente la una de la tarde, los participantes pudieron desplegar su creatividad en un cuento corto que tenía como condiciones un mínimo de una página y máximo 4. Vale aclarar que a la hora de evaluar no prima la extensión sino la capacidad de análisis, de descripción y de coherencia del texto. Al iniciar la jornada a los concursantes se les fue dada una temática en común que fue el hacer una confesion en el texto, y una individual que escogieron al azar por medio de distintos papeles en una bolsa.

“La temática en común está dada por una de las herramientas que se vio en los talleres y era la parte creativa, era sacar de ellos como entendieran que era una confesión porque ahí no se les dice su confesión sino simplemente una confesión. Entonces es como ellos en su análisis literario entienden a quién van a confesar, si por medio de un tercero van a confesar algo de ellos, o de alguien más. Las otras temáticas tienen que ver con las vivencias y contextos, sirven para guiar el relato hacia la violencia, familia, ciudad, otros sujetos, etc. Decidimos que fuera escrito en el momento porque es un concurso, por eso inicialmente se les dio un taller y después se los ubico en un tiempo y espacio para que ellos a partieran de su creatividad, es encontrar en ellos el potencial literario”, afirmó el magister Francisco Valencia, Jefe de la División de Gestión de la Cultura de la Vicerrectoría de Cultura y Bienestar de la Universidad del Cauca.

Daniela Amaya tiene, estudiante de comunicación social de la Universidad del Cauca, y fue una de las participantes del concurso de cuento corto universitario, para ella la experiencia fue muy grata y en su proceso de escritura le ayudaron las herramientas dadas en el taller visto anteriormente, así lo expresó: Me gusta mucho escribir, y me parece interesante que las universidades brinden este tipo de espacios porque uno enriquece sus conocimientos. El reto de escribirlo en 3 horas y trabajar bajo presión fue duro pero sentí que me fluyó, me gusto la temática, y pude conectar bien las dos temáticas en la historia. Me sirvió mucho el taller porque ahí dieron una recomendación y es que cuando estamos en cuentos cortos no hay espacio para ser muy descriptivo sobre las cosas, diferente a un libro que uno puede detenerse en detalles, entonces cuando empecé el cuento recuerdo que al principio describí mucho y luego caí en cuenta que eso me iba a consumir mucho tiempo, entonces lo enfoqué de forma diferente”.

“Me gusta mucho leer, soy profesor de filosofía e historia, pero no soy un escritor constante. En esta ocasión me fluyeron las ideas pero si se sentía la presión, me hubiera gustado tener más tiempo para redactar mejor, para sentirme más seguro sobre todo en la precisión de las palabras y en la sintáctica del texto, pero fue una buena experiencia. Creo que los estudiantes deberíamos participar más en estos espacios porque son muy nutritivos para la formación profesional”, aseguró Sebastián Barrera, docente de filosofía e historia y actual estudiante de psicología.

Al finalizar la jornada los cuentos escritos a mano se dejaron en sobres sellados para posteriormente ser entregados al personal especializado para ser evaluados. Los parámetros establecidos para la evaluación son las descripciones, que las temáticas estén relacionadas, la forma y construcción del cuento, originalidad, redacción y ortografía, entre otros factores literarios. Los participantes también debieron dejar un consentimiento firmando donde aseguran que todo el cuento es propio, puesto que si se detecta algún plagio, el texto queda automáticamente excluido del concurso.

Cabe mencionar que el viernes 14 de junio se realizó la clausura de la convocatoria de Cuento Corto Juvenil. Siendo las cuatro de la tarde, en presencia de los funcionarios de la División de Gestión de la Cultura de la Vicerrectoría de Cultura y Bienestar de la Universidad del Cauca se procedió a sellar la caja donde se recibieron 114 cuentos, siendo la Institución Educativa Liceo Alejandro de Humbolt, el colegio con mayor cantidad de participantes. También concursaron estudiantes de colegios como El Liceo Cervantes, la Institución Educativa Julumito y la Institución Educativa José Eusebio Caro. La premiación para las dos convocatorias se efectuará el próximo 18 de noviembre durante la realización de Popayán Ciudad Libro 2019 en el Centro de Convenciones Casa de la Moneda.